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Con la inestimable colaboración de Ignacio J.

jueves, 28 de junio de 2012

Empezando a entender los objetivos


Texto y fotos de Ignacio J.





17-55, 55-250, 300... ¿pero... para qué sirven?


Vamos a hablar de lo más común en nuestra mochila y de los objetivos que suelen venir en nuestros primeros kits, dejando para próximas entregas objetivos de usos muy específicos (ojos de pez, tilt-shift, super-teles...) y las posibles dudas que nos hagáis llegar estaremos encantados de intentar resolverlas.

 
Paisajes, situaciones urbanas o sitios cerrados en las que quieres abarcar lo máximo posible. Utilizaríamos nuestro 18-55 preferentemente entre 18 y 24mm. Se denominan objetivos angulares porque nos permiten abarcar mucho ángulo de visión (superior al ojo humano) y nos proporcionan una gran profundidad de campo.



En primeros planos puede ocasionar distorsiones de la imagen, pero también podemos utilizar este recurso de manera creativa.
Quiero que mis fotos salgan sin distorsiones y más o menos como la ven mis ojos. Utilizaremos focales entre 35-50 mm. y conseguiremos resultados aproximados a nuestra vista. Merece la pena probarlo; los objetivos de 50mm para nuestras cámaras son muy baratos. Fijaros en las líneas verticales de esta toma.





Para retratos utilizaremos distancias focales entre 70-105mm, hacen un enfoque muy selectivo y nos destacan a los sujetos del fondo desenfocando este.

Para situaciones en las que necesitamos acercarnos o no podemos, como animales esquivos o huidizos, competiciones deportivas... utilizaremos las mayores focales de las que dispongamos 135-300mm. La profundidad de campo es muy escasa y hay que ser muy fino con el enfoque. Por supuesto el foco en el ojo.


















Os dejo una muestra de unas fotos realizadas desde el mismo sitio con distintas focales para que comprobéis la diferencia.



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